Desde hace tiempo lo sabes, pero lo has estado posponiendo. Eso que los unía no existe más, en algún punto que no conoces desaparecieron los hilos que les mantenían juntos… y no estoy hablando de relaciones de pareja. Las amistades también se terminan.

Y cuando esto pasa, pueden llegar a doler igual que una ruptura amorosa. No importa si es tu culpa o del otro, pero pasó. Esto se acabó.

Cuando establecemos cualquier lazo no estamos pensando en el momento en el que se termine. Quizás en una relación de pareja comprendemos con más facilidad que existe esa posibilidad, pero con los amigos siempre creemos que van a ser eternos.

Motivos los hay infinitos, incluso a veces los desconocemos, solo pasa. Las amistades se rompen y no quiere decir que no hayan sido verdaderas.

Lo verdadero no tiene necesariamente que ser eterno. Las cosas que se viven con sinceridad son honestas y reales, pero esto no les convierte en irrompibles. Hay quienes dicen que si se rompe una amistad, no era verdadera, y no puedo mirarlo de forma tan radical.

¿Entonces qué ocurre?

Tan simple como que evolucionamos. A medida que vamos creciendo, lo que se espera es que maduremos, forjemos nuestra personalidad y tomemos decisiones acerca de lo que queremos mantener en nuestras vidas, fruto de la crianza, y aquellas cosas que decidimos sacar porque ya no congeniamos con ellas.

Un ejemplo muy vívido que tengo, personalmente, ha sido mi decisión de no seguir religiones y declararme agnóstica. Esto me alejó de personas, de algunas de inmediato, de otras progresivamente.

Aunque fuera complicado entender que algo así generara este conflicto, me sentí mejor al comprender que si alguien no me acepta por quien soy, no tiene que seguir en mi radar. Es decir, ¿por qué al otro le afecta una decisión tan personal? Necesitamos gente que nos respete, más allá de que congenie con un sentir con el que no estás dañando a nadie.

Y he ahí la piedra angular del asunto: cuando cambiamos, a la par de que nuestras amistades cambian, hay maneras de adaptarnos a esas transformaciones y seguir reconociendo la esencia del otro escondida en el fondo de entre toda esa envoltura de nuevos conocimientos, experiencias y traumas que fueron definiendo al individuo que alguna vez conociste desde un enfoque distinto.

Pero tampoco pasa nada si no logramos ese acoplamiento. Allí es cuando inician las rupturas, porque los caminos que cada quien haya decidido tomar, por más que sigan un mismo sendero en muchas circunstancias, tienen bifurcaciones y obstáculos imposibles de congeniar los unos con los otros. Decisiones.

En sencillas palabras, empezamos a vibrar diferente del otro y, por tanto, se rompe esa fluidez que nos permitía mantener los lazos.

Como en una relación de pareja, hay que tener la suficiente madurez para entender que se dio todo lo que quedaba y ya no queda más cosa buena para aportar.

En honor a esa amistad que existió, es más saludable romper la cadena y liberarnos del otro y liberar al otro de nosotros, para que ese espacio que alguna vez ocupamos y ocuparon, quede libre y pueda llenarse de una nueva energía que sí vibre en nuestra y en su misma frecuencia.

Por: Melissa Pérez-Segnini

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Etiquetas: amigos, amigos incondicionales, amistad, amistades, amor, problemas de amigos, ruptura de relación

10 respuestas a “Las amistades también se terminan”

1. Natt dice:

   07/08/2021 a las 10:34 pm

   Me pasó exactamente lo que escribes, tuve una amiga por más de 12 años, vivimos nuestra temporada de universidad y juventud juntas, viajábamos, hacíamos cosas de mejores amigas todo el tiempo, pensé que sería mi hermana para el resto de la vida. Sin embargo, nos conocimos cuando ambas éramos cristianas y hace tres años decidí irme de la iglesia y alejarme de la religión. Fue con esa decisión que tuve que entender que éramos amigas de un lugar y no de la vida. Ella no supo entender mi nuevo camino y yo tampoco pude adaptarme a su vida de cristiana. Así que hace tres años nos alejamos. La amistad se rompió y aunque lloré muchos meses, ahora sé que fue lo mejor. Algunas veces nos saludamos por los buenos recuerdos, sin embargo, cada una vive su vida. He intentado volver a abrirme con nuevas personas, pero sin apegos y sobretodo lo que escribes…. Lo verdadero no quiere decir que sea eterno, ahora disfruto de las personas sin ponerles un para siempre. Sé que tanto ellos como yo podemos cambiar e irnos. Ya no duele y vivo más tranquila. Quería compartirlo. Los 30 trajo eso para mí.

   • Melissa Segnini dice:

     08/08/2021 a las 9:31 am

     Me encantó leer tu historia, Natt. Es tan real y muchas personas pueden identificarse. Debemos aprender a aceptar la salida de personas que no van a nuestro ritmo aunque las queramos, porque al final, es más el desgaste que lo que pudieran aportarte.

2. KeyCy dice:

   08/08/2021 a las 12:35 pm

   Hola!
   Creo que depende, yo si creo que cuando se rompen una amistad no era verdadera.
   Me pasó hace poco con una “amiga” con la que tenía 14 años de amistad. Resultó que a ella le iba mal en su trabajo y a mí bien en el mío, cuando me promovieron a jefa, yo la ayude a que venga a trabajar conmigo ( el peor error que cometí).

   Ella al parecer no soporto que yo fuera su jefa o que en el trabajo sea sería y al salir normal (por reglas debía comportarme como jefa), que en un momento que yo no fuí a trabajar dado que me enferme, hablo mal de mi a todos a mis espaldas.

   Lo peor que me enteré por otra compañera dado que ni ella tuvo la molestia de decírmelo y me eso me costó mi empleo, ahora ella gana, se quedó con mi trabajo que conserve durante dos años y yo estoy desempleada.

   En cuestión, hay amistades falsas y cuando se terminan es porque eso fueron.

   • Melissa Segnini dice:

     08/08/2021 a las 2:22 pm

     ¡Gracias por leer y comentar, querida KeyCy! En mi experiencia, he tenido amistades que eran falsas, y otras que eran verdaderas, pero por distintas circunstancias se terminaron. La que considero verdadera no ocurrió por una traición, sino porque esa persona decidió asumir, en vez de aclarar asuntos y preguntar. No creo que ella sea una mala persona, solo tomó decisiones sin darle chance a la racionalidad

3. Inés dice:

   08/08/2021 a las 4:48 pm

   Hola! Puede pasar como en cualquier vínculo cuando uno ya no comparte lo mismo que la otra persona se va distanciando o por diferencias que en la distancia son más notorias. Igual una siempre los lleva en su corazón.Saludos!

   • Melissa Segnini dice:

     11/08/2021 a las 3:34 pm

     Definitivamente, siempre los llevamos en el corazón, aunque ya no formen parte de nuestra vida

4. Mari dice:

   08/08/2021 a las 5:25 pm

   Es triste reconocer cuando una amistad se termina y a veces nos queremos engañar diciéndonos que las cosas están bien , tengo una amiga a la cual quiero mucho y la conocí desde la prepa , pero de unos años para acá todo ha cambiado , muchas veces siento que competimos entre nosotras y ya no nos tenemos la misma confianza que antes , ademas de que yo siempre tengo que buscarla y ya me canse de hacerlo y he decidido dejar esa amistad como un buen recuerdo.

   • Melissa Segnini dice:

     11/08/2021 a las 3:35 pm

     Siempre sabemos cuando está irremediablemente rota, pero sí es difícil aceptarlo. Haz lo que te dé más paz

5. Ivett Sanchez Bernal dice:

   08/08/2021 a las 6:06 pm

   Yo tuve una amistad de más de 15 años, fuimos “mejores amigas”, por cuestiones de chismes la amistad se terminó, aún me duele, pero me duele más que ella nunca aceptó las cosas que dijo de mi durante mi embarazo, al final yo le reclamé pero ella jamás lo aceptó, incluso me echó en cara las cosas que le había regalado a mi bebé, ahora trato de no cometer los mismo errores, y al final ella perdió a una amiga que de verdad la consideraba una hermana, y eso le será muy difícil de encontrar 😌

   • Melissa Segnini dice:

     11/08/2021 a las 3:36 pm

     Súper difícil de encontrar, y lo comprobaste porque al final, esta a quien considerabas hermana se fue. Pero siempre llega alguien mejor, sin dudas